Ser más feliz puede reforzar el sistema inmunológico. La felicidad también puede ayudar a reducir los niveles de estrés y a proteger el corazón reduciendo la presión arterial.
Muchos ni siquiera se plantean que la felicidad pueda influir en su salud, pero la realidad es muy distinta y la ciencia empieza a demostrarlo.
Vamos a demostrarte que la felicidad y la salud están muy relacionadas y que la felicidad es realmente importante en la vida, por más razones de las que muchos creen. Después de esto, sabemos que te atreverás a imaginar un mundo en el que los cerca de siete mil millones de personas sean felices en sus vidas, tal y como nosotros lo estamos imaginando y trabajando para convertir este sueño en una realidad.
La importancia de la felicidad para la salud
Muchos científicos creen desde hace tiempo que la felicidad juega un papel esencial en nuestra salud y bienestar general, pero solo ahora hay cada vez más estudios que confirman esta afirmación.
Una revisión de 2017 analizó precisamente esto: examina cómo el bienestar subjetivo influye en varios aspectos de nuestra salud física. Esta revisión sí encuentra una correlación directa, pero es mucho más crítica, ya que combina la investigación de alrededor de dos docenas más de revisiones y más de un centenar de estudios.
Todos ellos coinciden, sin lugar a dudas, en que la felicidad sí puede influir en la salud -dice el autor principal del estudio, Ed Diener, un psicólogo de prestigio mundial apodado Dr. Felicidad por sus extensas e influyentes investigaciones sobre el tema.
El estudio no indica cómo funciona esta correlación, ya que ninguna investigación científica empírica puede confirmarlo por ahora. Diener dice que esto es como los cigarrillos, todavía no podemos encontrar una razón por la que algunos fumadores empedernidos viven hasta los cien años mientras otros que han fumado mucho menos mueren de cáncer.
Sin embargo, el estudio sugiere que podría deberse a una razón sencilla. Las personas más felices llevan una vida más sana. Comen más sano, hacen más ejercicio y duermen lo suficiente. Un estudio de 2017 afirma que las personas con un bienestar positivo son un 47% más propensas a consumir alimentos saludables y un 33% más propensas a ser físicamente activas y, por tanto, a hacer más ejercicio. Otro estudio más pequeño afirmó que las personas que tienen niveles más bajos de bienestar positivo son un 45% más propensas a tener problemas para dormir y conciliar el sueño.
Además, hay investigaciones que apoyan la teoría de que ser más feliz puede reforzar el sistema inmunológico. La felicidad también puede ayudar a reducir los niveles de estrés, y ayudar a proteger el corazón al reducir la presión arterial.
El futuro de la salud puede ser más prometedor
Todo esto no es más que un rasguño en la superficie, y la esperanza de Diener y de muchos otros es que toda esta investigación y las que le sigan convenzan finalmente a los médicos para que empiecen a controlar las emociones positivas durante los exámenes físicos rutinarios, y no se concentren sólo en las malas. También esperamos que la gente empiece a prestar más atención a su estilo de vida y acabe encontrando formas de ser más feliz.
La felicidad, su correlación con la salud y el futuro de la propia salud es un tema que vamos a debatir en el próximo Ágora Mundial de la Felicidad en 2020. Un montón de expertos y futuristas abordarán este tema durante un día entero, mientras que los otros cuatro días abordarán el futuro de la educación, el trabajo, el autodominio y el desarrollo social, y las tecnologías transformadoras.
Tú también puedes participar, y deberías hacerlo. Todos tenemos que esforzarnos por conseguir un mañana y un planeta mejor, con personas felices que trabajen juntas por un mundo siempre de mayor calidad.